Llevamos toda la semana lloviendo, ya se sabe cuando llueve en San Marcos 40 días de charcos, pensaba si las Isauras seguirían estando en los charcos efímeros o por fin ya habrían acabado su ciclo de este año.
Esos eran mis pensamientos cuando hoy me dirigía a su encuentro.
La verdad es para la cantidad que ha llovido los charcos efímeros estaban bastante exiguos y el agua apenas si tenían dos o tres dedos de profundidad.
Me dispuse a comprobar su presencia y si, si que estaban con su incesar movimiento de la orilla hacia el interior y viceversa.
El agua no era tan abundante como cuando las descubrimos el día 15 de Mayo, tal vez sea por que como dice en el pueblo “el agua a caído con cabeza y no ha sido corredera”, lo que quiere decir que no ha sido de tormenta y se ha quedado en la tierra.
Empecé el recuento de los sitios donde había localizado Isauras y uno por uno me fueron confirmando, para mi alegría, que había en todos
No obstante todo no tenían que ser alegrías, detecte que un charco grande habian manchas de aceite, si abundantes manchas de aceite, seguramente alguien había tocado las turbias aguas con alguna maquina de motor.
Tambien estaban los charcos llenos de Branchipus schaefferi y de Triops cancriformes. Pero tambien señales de charcos secos en los que aun se apreciaba las marcas de Isauras, Brachipus y Triops, pero así es la vida.
Estos animalillos llevan mucho tiempo entre nosotros y si los dejamos tranquilos nos acompañaran mucho tiempo mas.
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